Antes de finalizar la sesión los concejales trataron el proyecto que presentaron los ediles del Partido Obrero, en el cual proponían que el cuerpo se exprese para pedirle al Poder Legislativo que derogue la ley provincial 7700.
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Antes de finalizar la sesión los concejales trataron el proyecto que presentaron los ediles del Partido Obrero, en el cual proponían que el cuerpo se exprese para pedirle al Poder Legislativo que derogue la ley provincial 7700.
Sobre esta declaración los concejales propusieron modificaciones radicales, al punto que terminaron por aprobar una iniciativa que contempla que el Concejo Deliberante ve con agrado que tanto el Gobierno provincial como los legisladores reciban las quejas que plantean los feriantes y se expresen al respecto.
Esto ocurrió luego de que los feriantes se hicieran presentes en las afueras del Concejo Deliberante, en el momento en que los ediles sesionaban. Estos últimos hicieron un cuarto intermedio y formaron una comisión para escuchar el reclamo.
“Necesitamos que nos apoyen. No estamos en contra de la ley, pero tiene requisitos que exceden nuestras capacidades. Nos van a perjudicar a todos si nos echan de donde estamos”, les dijo a los concejales uno de los feriantes en la reunión.
A su vez, los ediles coincidieron en manifestarles que el problema excede el ámbito municipal por tratarse de una ley provincial.
Finalmente, se comprometieron a recibirlos mañana en la comisión de Servicios Públicos, Actividades Comerciales y Privatizaciones, para delinear la manera en que se procederá.