El cadáver de un niño de 7 años fue hallado ayer dentro de un freezer del negocio de sus padres, ubicado en la localidad rionegrina de San Antonio Oeste. El congelador está ubicado en la vereda del almacén, y ahora los investigadores trabajan para comprender qué fue lo que ocurrió.
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El cadáver de un niño de 7 años fue hallado ayer dentro de un freezer del negocio de sus padres, ubicado en la localidad rionegrina de San Antonio Oeste. El congelador está ubicado en la vereda del almacén, y ahora los investigadores trabajan para comprender qué fue lo que ocurrió.
Según denunció su madre, ayer Jairo de Mora salió a jugar con sus amigos y nunca regresó. Preocupada por su ausencia, alrededor de las 19 del viernes, decidió ir a la comisaría para denunciar su desaparición.
La policía activó el protocolo de búsqueda y como no había noticias, incrementaron los rastrillajes en la zona cercana al mar. El caso conmocionó tanto a la ciudad, que incluso los vecinos que se enteraron del hecho se pusieron a colaborar con los oficiales.
Luego de una intensa búsqueda, el cuerpo del niño fue hallado a las 5 de la mañana del sábado dentro del freezer del almacén. Según confirmó el Diario de Río Negro, los padres fueron llevado a la comisaría para prestar su declaración, aunque por ahora se cree que el chico habría entrado al congelador para jugar y no pudo salir.
Según confirmó el comisario de San Antonio, Gustavo Verdugo, durante toda la mañana de ayer la policía criminalística trabajó en el lugar para certificar la muerte. El cuerpo del niño fue trasladado a la morgue de Viedma para realizarle la autopsia, aunque por el momento todo parece indicar que murió por congelamiento ya que no presenta signos de violencia.