“Me resulta ingrato que se hable mal de mi cuando hay mucha gente trabajando detrás de uno”. Gabriel Savino de este modo comenzó a decir su verdad en medio de un enrarecido clima político en el club por las elecciones que se avecinan.
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“Me resulta ingrato que se hable mal de mi cuando hay mucha gente trabajando detrás de uno”. Gabriel Savino de este modo comenzó a decir su verdad en medio de un enrarecido clima político en el club por las elecciones que se avecinan.
“Para nosotros primero está el club, el estatuto y eso es lo que queremos cambiar”, agregó el presidente de Aprocen para comenzar a explicar el quiebre de la relación con la comisión directiva de Central Norte.
¿Por qué te atacaron?
Después de una reunión con el presidente Macaione, en la que le propusimos más ayuda, en la que también estuvo Chibán (presidente de la Liga Salteña), que fue invitado y en donde el diálogo fue respetuoso, superador, al día siguiente sucedió otra cosa. En lugar de buscar consenso se anunciaron elecciones inminentes. Nos encontramos con una posición intransigente y ahí dije que si no era posible la unidad íbamos a buscar la conducción del club. Y el compromiso asumido lo vamos a respetar, nos quedan dos años de contrato y mucho para hacer. No teníamos aspiración política, lo dijimos siempre, pero ahora cuando el escenario es de una escalada de agresiones inusitadas lo que se viene será buscar respuestas que no hemos tenido. Como socios vamos a auditar todos los contratos y el presupuesto.
Entonces, si hay elecciones, ¿se van a presentar?
No vamos a buscar más que institucionalidad. Así como reconocemos que Central Norte, pese a magras campañas deportivas, se muestra como un club ordenado, queremos se exponga ese orden, sustentado con documentación, como lo hace Aprocen.
Pero vemos una posición cerrada, un club que no respeta su estatuto, en el que no se delibera, las reuniones son citadas media hora antes y no se citan a todos. Hay miembros de Aprocen que forman la comisión directiva y nunca votaron para que haya elecciones ahora.
La posibilidad de charlar y negociar no la hemos cerrado nosotros, las cerró el vicepresidente, cuando habló de elecciones pensé que hablaba de Peñarol. Así vamos a seguir viendo personajes, disfrazados de dirigentes, y proyectos individuales disfrazados de proyectos colectivos.
Aún así remarcás la gestión del presidente.
Macaione es la persona que más trabaja en el club, eso es innegable, pero en ese mérito hay un gran defecto. Un club no lo puede conducir una sola persona. Es imposible y eso es lo que critico. Así como hubo un gesto de apertura que siempre valoramos, después no hubo consideraciones de nuestra opinión. Nosotros quisimos ayudarlo. Otra persona valiosa que lo acompaña a Pino es el contador (Pablo) Méndez, no es dirigente y ayuda mucho más que cualquier dirigente, Daniel Espilocín es otro tipo valioso, pero nadie más.
Está claro que Aprocen ya no se preocupa solo por las inferiores, sino también por todo el club.
- Sí, nos preocupa Central Norte. Aunque hubo una apertura y entraron dirigentes de Aprocen a la comisión directiva, pero es una presencia virtual. Y adonde quiere ir la comisión hoy, nosotros no queremos. Lo están llevando a la mediocridad que la afición de Salta soporta desde hace mucho tiempo.
Cuando se dice que Aprocen usó a las inferiores para manejar al club, ¿qué respondés?
No fue así, y las condiciones para que el escenario cambie no las pusimos nosotros, esto debe quedar claro como el agua. No la pusimos nosotros. Aprocen es un grupo coherente. Lo que dice, lo hace. Así como le ofrecimos ayuda a Macaione y no la aceptó, decimos que esta situación no puede ser sostenida.
Las elecciones les va a dar la posibilidad de conducir al club. Eso está bueno y es democrático.
Es lo que sigue. O nos volvemos a la casa después de darles al club horas todos los días o seguimos. Si nos vamos, vuelve a perder Central Norte. Nunca buscamos esta posibilidad, pero puestas así las cosas, el escenario que puso la comisión directiva, nos llevará a eso. Pero no se puede ir a la asamblea sin antes revisar padrones, balances y contratos.